Exponerlos al sol sin ninguna protección puede afectar tanto la belleza como la salud de nuestra piel. Por eso, saber cómo proteger la piel del sol es tan importante.
Si quieres aprender a proteger tu piel adecuadamente a continuación te hablaremos de ello y podrás encontrar algunas recomendaciones generales que no puedes dejar de usar.
Formas adecuadas de proteger la piel del sol
Cuando se trata de brindar protección a nuestra piel el uso de protectores solares acordes a la necesidad es esencial. Así mismo, es muy importante seguir ciertas pautas como lo es evitar exponernos al sol en sus horas de mayor intensidad, desde las 12 del mediodía a las 4 de la tarde.
Ten en cuenta que si bien el sol nos ayuda a sintetizar la vitamina D, tan importante en la adecuada absorción del calcio, así como actividad nuestra circulación, mejorar nuestro ánimo y reforzar nuestras defensas, una exposición demasiado prolongada e inadecuada puede generar manchas, envejecimiento prematuro, pérdida de la elasticidad, quemaduras y hasta cáncer.
Ahora, para proteger la piel del sol debemos entender que hay diferentes tipos de piel y dependiendo del tipo que tengamos debemos usar uno otro factor de protección. Esto se debe a que cada piel tiene una reacción diferente ante los ratos solares.
De esta forma, las personas de piel más clara requieren de un factor de protección mucho más elevado que aquellas que tienen una piel más oscura. Además, su exposición ha de ser más corta.
No todos los fotoprotectores sirven para todas las personas; por ello, antes de decantarse por uno es preciso conocer el fototipo de piel del individuo, es decir, el conjunto de características físicas con las que nace cada persona y que determinan su capacidad para broncearse. Existen 6 fototipos diferentes en función del color del pelo y de la piel, así como de la facilidad con que se queme o se broncee la piel.
Y entonces ¿Qué factor necesitas según tu tipo de piel?
- Si tu piel es muy clara, con pecas y además tienes los ojos azules y el pelo rojo requerirás de un factor de 50.
- Si en cambio es clara, pero tu cabello es rubio y tu piel se quema con frecuencia, pero no siempre, el factor será de 30.
- Para la piel blanca en general el factor mínimo es de 15.
- Y si es ligeramente clara y también oscura, con ojos y cabello negro o castaño deberás usar un factor entre 8 a 10. Esta piel casi no se quema pero si se pigmenta con mucha facilidad.
- La piel oscura por su parte no se suele quemar pero si se broncea con mucha facilidad. Requiere una protección de 6 a 8.
- En el caso de la piel negra, al no quemarse, requiere de un mínimo de 4 a 6.
Debes entender que el FPS o Factor de Protección Solar nos indica por medio de su número que tiempo se puede permanecer bajo el sol antes de que se surja el enrojecimiento. Así, un FPS 15 nos dice que podemos tomar el sol por un tiempo superior de 15 veces al que normalmente se toma antes de empezar a enrojecerse.
Finalmente, ten en cuenta que usar protector para proteger la piel del sol no evitará que te broncees, pero si enlentecerá el proceso.