Cuando decides optar por solicitar un crédito y las entidades bancarias te lo niegan, una de las alternativas más sencillas y rápidas es optar por solicitarlo con los prestamistas particulares lo cual podría serte de mucha ayuda si necesitas solventar algunas dificultades económicas de manera urgente.

¿Quiénes son los prestamistas particulares?

Los prestamistas particulares son un grupo de entidades que se encuentran dentro de un ambiente liberal financiero y se dedican a facilitar cierta suma de dinero a través de préstamos, tanto personas autónomas como a empresas. Se puede decir que los Prestamistas Privados pueden ser los ángeles o demonios con los cuales las personas se pueden llegar a tropezar en algún tiempo de sus vidas.

Frente al elevado riesgo de que las personas no paguen la deuda, las entidades financieras tradicionales por lo general, no confieren préstamos de bajo importe, por lo cual en ciertas oportunidades es necesario asistir a los prestamistas privados o particulares para lograr conseguir un crédito urgente. Los prestamistas privados se valen de su capital para otorgar préstamos de aproximadamente el 20 o 30% del valor total de la tasación de la propiedad que aquellos individuos que precisen créditos urgentes utilicen como su aval.

De acuerdo con su estructura, existen 2 clases de prestamistas:

• Prestamista Privado.
• Prestamista particulare.

A continuación te explicamos ambos tipos de prestamistas

Prestamistas Privados

Los Prestamistas Privados normalmente son unas efectivas entidades financieras, que cuentan con un capital, que aunque continua siendo totalmente privado, posee una estructura empresarial mucho más desarrollada que las entidades bancarias.

Estos Prestamistas Privados brindan una asistencia segura y rápida, además sus condiciones suelen ser mucho más accesibles que las que poseen las entidades financieras tradicionales. Asimismo, uno de sus beneficios es que es posible solicitar préstamos urgentes y obtenerlos incluso si te encuentras en la lista de morosos de los bancos o cualquier otra entidad financiera.

Con este tipo de crédito es posible obtener el dinero en aproximadamente 72 horas, sin necesidad de realizar muchos trámites y papeleos, ya que lo único que realmente necesitas es un documento de propiedad sobre un inmueble, vehículos, etc., el cual será tomado por el Prestamista Privado como garantía.

Prestamistas particulares

Principalmente, el prestamista particular se caracteriza sencillamente por eso, por ser un particular. Posiblemente, se trata de un individuo o un conjunto de individuos que intentan emplear su capital privado, para ayudar a aquellas personas que necesitan solventar sus deudas y al mismo tiempo incrementar su capital al recaudar los intereses.

Sus condiciones comúnmente se pueden negociar, ya que se trata de particulares con los cuales se negocia frente a frente, sin embargo, esto también puede hacerlo un poco más arriesgado, y algunas veces esta opción puede causar desconfianza. Esto se debe a que actualmente existen muy pocas personas que se animan a prestar su dinero sin contar con un aval que garantice que lo recuperarán.

En este caso el reintegro y los intereses igualmente son acordados, y los montos varían de acuerdo con el prestamista particular.